Inventos que son más viejos de lo que pensabas

Leyendo un par de libros viejos y empolvados que me dieron una alergia bien focop, pude encontrar datos sobre inventos que en lo personal pensaba que eran así dizque modernos y vaina, pero ON, resulta que son muy viejos. Son tan viejos como la sarna, tan añejos como Mayín Correa y tan seniles como el Algebra de Baldor de mi casa. Ese libro lo usó mi abuela y aún lo usa esta generación.

En la imagen: Problemas

Y así, mirando cosas viejas como la canción de Rey Ruíz, encontré que… 

5. Los Vibradores se usan desde los tiempos de las cavernas.

Huge Dildo tamaño XXL

Mi cerebro funciona más o menos así: música, sexo, música, sexo, Bob Esponja, música, sexo y así sucesivamente todo el día. Y por eso empiezo con este tema. Es que siempre se ha pensado que los dildos vienen de los revoltosos años 60. La década pre-amor libre. La década donde había protestas anti-guerra por todas partes, donde Los Beatles y Los Monkees eran dioses y, bueno, también la década donde un ventrílocuo (no lo estoy inventando) pasaba su tiempo libre diseñando cosas para que las mujeres se hicieran el auto – sexo. 

 Haciendo la AutoSexación. 

Ted Marche es el nombre del man que se puso una fría noche de 1966 a diseñar un vibrador de madera. Probablemente en su mesita de noche, escuchando música clásica mientras se terminaba de desangrar alguna de sus víctimas, porque este tiene que ser el hobby más creepy que he conocido en mi vida. Igual y también puede ser envidia mía porque años después el señor Ted tenía una industria multimillonaria en sus manos.

Ya para 1976 March Manufacturing había vendido más de 5 millones de vibradores. Aún cuando el «invento» fue prohibido en ciertos lugares como Texas, por ejemplo, lugar donde asumimos que las mujeres no lo necesitan (Fucking Texas, siempre valiendo cebo) 

La cosa es que puse «invento» así entre comillas, porque ¡Oh Sorpresa! los dildos no son de los años 60s. Son de un poquito más atrás, como del Período Paleolitico Superior por allá por el año 28,000 A.C., o sea hace LONG TIME AGO. Y creo que nadie tiene que sorprenderse de esto. Es una necesidad, y siempre ha tenido que ser así. Por lo tanto era obvio que nuestros ancestros se iban a poner a juguetear y vaina.

Con estas peñas. ¡Madre mía!

Estos Dildos Cavernícolas se encontraron en las cuevas Hohle Fels en Alemania. Y para las que ya están sufriendo sobre que eran de piedra y vaina, tranquilas, era de piedra caliza. O sea, suavecitas, para entrar con mayor comodidad en dónde tienen que entrar y dónde se supone que no tienen que entrar, pero también pueden entrar, por que cada quién decide que hace con sus agujeros y si la parece rico, pues hágale. Aquí no se juzga a nadie. #LoveisLove #HoleisHole

También tenemos la información de que medían 20cm (¡Shiusha!), lo que significa que las mujeres de aquel entonces tenían mucha capacidad en sus cavidades (no quiero decir vaginas, pero ya lo dije, so…). Por último los científicos que descubrieron todo este relajo también nos corroboran que el asunto está bien «pulido». Por lo que intuyo que estos científicos se divirtieron mucho haciendo este trabajo.

Después de la era de las cavernas, también Grecia y otras civilizaciones empezaron a hacer sus dildos y sus bolas y cosas así para divertirse porque mientras existan agujeros, existirán juguetes.

Ahora hablemos de algo menos sexual. Bueno, creo yo. Aunque conozco personas que se excitan montando el siguiente aparato.

4. Las Montañas Rusas son del Siglo 18, o sea 1700 y pico.

Foto tomada por un nokia N91

Si algo nos ha enseñado el internet es que los rusos… Iba a decir que son los más borrachos, osados y locos que hay, pero luego me lee Putin y no sabría dónde esconderme. Así que voy a saltarme la parte esa donde me burlo de los rusos y mejor voy directo al tema este de las benditas montañas esas.

Lo que se sabe de las montañas rusas es que la primera de la que se tiene conocimiento público y fue vista por todos es de 1884  en la feria de Coney Island, Estados Unidos. Le decían la Swicht Back railway, creado por Lamarcus Thompson. Un hombre con mucho tiempo libre y un fetiche por ver gente mareada y vomitando. Funcionaba a seis millas por hora y costaba 5 centavos de dólar montarla. Toda una fucking ganga para quienes tenían ganas de sufrir.

Imagen o no imagen de la montaña rusa del Coney Island.

Pero bueno, esta no fue la primera montaña rusa. Esta fue la primera montaña rusa decente y usable. Y es que antes de esta montaña rusa, los rusos le dieron su nombre a esta montaña. Con montañas de hielo, porque pues…son Rusos. Obvio que la harían con hielo. 

Sólo voy a decir que al parecer parte de la cultura rusa incluye encontrar una nueva forma de morir cada día. Es algo así como un reality show extremo, donde para entrar tienes que, primero, ser ruso, y segundo, no tenerle miedo a la muerte. Y es que estos señores no esperaron a que se inventara la electricidad para diseñar estos bichos que suben y bajan y hacen que sientas los testículos en el esófago. Ellos no podían esperar tanto, así que tenían sus montañas «rusas» antes de la electricidad. Ellos eran cool antes de que la electricidad se hiciera cool. Y eran cool literalmente también porque los aparatitos estos funcionaban gracias al hielo igual que un raspao.

«frío – frío, como el agua del río…»

1784, fue el año dónde se construyó esta primera montaña o aparato de entretenimiento para gente a la que le gusta sufrir. Fueron unos ingenieros rusos en Rusia (duh!). Por eso el nombre de Montaña Rusa. Y no era más que una serie de toboganes o surra surras de hielo donde la gente se montaba en carritos de madera (parecidos a los que hay ahora) y ya, pal carajo, se tiraban en esa vaina y sube y baja, sube y baja, hasta llegar al otro lado y de allí pa’ atrás otra vez, a la velocidad suficiente como para tener que cambiarte los pantalones al salir o escaldarte si te los cambiabas dos horas después (por el frío, el orine y la vaina, ustedes me entienden).

Ah, y les recuerdo nuevamente que no funcionaba con electricidad, sino con un poquito de carbón para prender la mecha y gravedad. Eso era todo. 

Antes de seguir, chequea la historia del LADA. Un Auto que también es muy viejo.

Seguimos con el artículo.

Mejor hablemos de algo que no mate gente, o que se supone que no mata gente pues.

3. Los Cigarrillos Electrónicos se inventaron en los años 60s

«I´m vaping and shit, bicos veiping is cul an chet.»

Atrás van quedando esos hermosos días en que podías ir a conocer a alguien con la excusa de pedirle un encendedor o que te regalaran un cigarro. Ya ni gorrero te dejan ser en estos tiempos que vivimos. Ahora te acercas a alguien y no te dicen nada, sólo se meten su cigarro electrónico en la boca, inhalan y luego te tiran el humo en la cara para hacerte ver miserable. 

«y me vale verg…»

Se dice que los cigarrillos electrónicos son de los años 2000. De 2003 para ser más específico. Año en que el farmacéutico chino, con el nombre más gracioso que he escuchado hoy, Hon Lik, saca la primera patente de un cigarrillo electrónico basado en nicotina. Al año siguiente empieza a producir este chéchere. La vaina se pega, la manda a otros países y ¡zass! Todos felices y bien chics con esta mamarrachada.

Bitch better have my money.

Pero, antes de Hon Lik, alguien ya había patentado los cigarrillos electrónicos, convirtiéndolo en una vaina no tan moderna, sino más bien en algo que ya se había inventando en una época donde la sociedad no estaba lista para ser cool. Y fue el emprendedor Herbert A. Gilbert quién patentó el aparato por allá por el año 1965.  El coso este funcionaba casi igual a los cigarrillos modernos: su modus operandi era a base de baterías que calientan un líquido que crea vapor y lo puedes inhalar sin quedar hediondo a cantina de Avenida Perú. Y el diseño hasta se veía como una cosa bien psicodélica que usaría el Doctor Who (Si, yo veo Doctor Who, soy así de NERD. El Gallinazo que escribe es un Nerd mi gente)

Foto que no entiendo, pero se ve COOL en el artículo. 

Y para los que se preguntan que pasó con Gilbert, pues el man sigue feliz y ayudando a que la tecnología siga mejorando para salvar vidas a través del cigarrillo. También recibió billete.

¿Y saben que otra cosa también es muy vieja?

2. La primera computadora es de 1933 y El primer juego computarizado es de 1914.

«yeiii, máquinas and shit»

Para todo aquel que puso atención en clase en sus años de colegio, o sea todos nuestros seguidores bellos y hermosos, las computadoras son un invento del siglo XX. Nacidas a raíz de la necesidad del ser humano de decodificar pendejadas. En este caso pendejadas serias, o sea códigos que tiraba el enemigo en la Segunda Guerra Mundial. Así que por allí por esas fechas es que puede estar el nacimiento de las computadoras. Algunos atribuyen este logro al inglés Alan Turing  y otros al ingeniero alemán Konrad Zuse. Así que la verdad sobre quién inventó las computadoras va a depender de si le preguntas a un alemán o a un inglés. En lo personal yo voto por el alemán, esa gente hace todo bien. Salvo…un par de vainas que hicieron en la segunda guerra mundial.

«Fack Yu» – Turing.

Y como el ser humano es un ser de ocio que no podía dejar pasar esta brillante oportunidad para quitarle seriedad a este descubrimiento creando alguna mamarrachada que nos mantuviera entretenidos a lo pendejo, nacieron entonces los videojuegos. Y aunque hubo muchos video juegos, y también es debatible cuál fue el primero de todos, al final esta distinción ha recaído por votación popular a SpaceWar! un juego de 1962 creado por Steve Russell. El juego consistía en una estrella que atraía a dos naves espaciales a través de la gravedad. Las naves entonces debían intentar chocarse por culpa de la atracción de la estrella, mientras se disparaban. Como verán, no era ni tan pendejo el juego para ser el primero de todos.

Retiro lo Dicho, si era bien fucking pendejo y feo.

Bueno, esto es lo que se piensa, pero resulta que nel, ni fu ni fa. Ni la primera computadora es de la Segunda Guerra Mundial, ni el primer juego de computadora fue la cosa esa negra con dos dildos blancos eyaculando gotitas. ¡No! Ambos inventos son de mucho más atrás.

Empecemos por la computadora, la cual nació a raíz de que mister Charles Babbage estaba harto que la gente fuera incapaz de calcular bien por que Fuck! Todo el mundo debería saber calcular bien and shit. Así que «Babe», como cariñosamente le voy a apodar porque me da pereza volver a escribir su nombre, decidió inventar una calculadora gigante, difícil de entender y que no cabía en una maleta escolar, ni mucho menos en un bolsillo. O sea, este mamotreto:

Foto: Un mamotreto

Para lograrlo pidió al gobierno británico que financiara su proyecto a partir de 1822. Y lo fucking logró. Luego nunca lo terminó y nomás dejo los planos y demás awebasones mientras se distrajo creando más y más proyectos que nunca en su puta vida iba a terminar. Pero al menos era simpático y siempre conseguía dinero para sus vainas.

10 años pasaron y la calculadora nada que salía. Así que en 1833 «Babe» hizo lo que cualquier bullshitero con clase haría: echarle la culpa a todo el mundo y decir que no terminó esa idea porque en el camino encontró la luz y tenía otra idea mejor. La máquina analítica. La cual funcionaba con tarjetas perforadas que le daban a la máquina una operación matemática y la máquina te daba la respuesta. O sea, estamos hablando de la abuelita de las calculadoras. Esta, al menos sí funcionaba, lo cual era algo bueno. Y de paso inventó una nueva profesión, ya que para hacerla funcionar había que «programar» las benditas tarjetas. Tarea que recayó en Augusta Ada King o Ada Lovelace condesa de Lovelace. Lo cual la convierte en la primera programadora de la historia. A ver como les quedó el ojo con esta vaina.

«Boom Bitches!» – with love, ADA

Y así como con la computadora, el primer juego de computadora tampoco es de por acá de estos tiempos. Resulta que el primer juego computarizado es de 1912. “El Ajedrecista” es un invento de Leonardo Torres Y Quevedo a.k.a. El Tesla de España. Un man que tiene entre sus diseños más psicodélicos: carros que se mueven a través de un tendido eléctrico, dirigibles y máquinas a control remoto. El man era un demente y supo reconocer que la máquina de «Babe» podía servir para vainas entretenidas también, por lo que se inventó «El Ajedrecista»: Un juego que movía las piezas de ajedrez primero de manera electrónica, a través de cableado y luego con magnetos y un brazo mecánico. Yes, Leonardo era un fucking genio y tú ni sabías quien era.

«Started from the bottom now we up» – Quevedo.

El juego funcionaba, y funcionaba muy bien. Tan bien que podía completarte un juego y hasta esperar que el otro usuario hiciera su movida. Pero lo más loco de todo es que no podías ni siquiera hacerle trampa a esta vaina. Ya que si hacías una mala movida tres veces se acababa la partida y el juego se negaba a seguir, así tipo niño malcriado y vaina. O sea que Quevedo inventó también esa vaina de las tres vidas y el Game Over y toda esa shit.

Ahora los dejo con un video de la máquina funcionando en 1951 y confundiendo a todo el fucking mundo.

¿Vieron cómo esa shit se movía sola? Bueno eso es brujería o bujía o algo así con «bu». Por eso mejor paso a nuestro Número 1.

1. El Streaming es de los 1800s

Netflix antes de tu Netflix Madafoca.

El Streaming es ese relajo que los amantes de las conspiraciones dicen que va a acabar con la tv, el cine, la radio, el mundo, el universo, las esferas del dragón, en fin, que va a acabar con todo. Esto porque la gente vive conectada y ya nadie manda en lo que quieras o no quieras ver.

El Streaming a.k.a El Anticristo o Thanos, nació como lo conocemos actualmente por allá por el año 1995 cuando se lanzó Real Audio . Y si te acuerdas de esa vaina estás igual de viejo y pellejo que yo. Real Audio era para los real gangstas for life que se podían aguantar horas mientras se descargaba su porn… digo, su audio o canción favorita. Así una balada bien bonita, y luego hacía el streaming de dicho audio o video en sus ordenadores.

Más old school que esto, imposible.

Después de estos inicios tormentosos, donde muchos ordenadores pagaron el precio de la poca paciencia de la gente y murieron de un golpe, nacieron entonces Spotify, Netflix, Amazon, Itunes y todos estos relajos que ahora te hacen el streaming al instante. Pero Wait! Este servicio es mucho más viejo de lo que ustedes podrían imaginar.

«Ilústrame.»

Hoy les vengo a hablar hermanos y hermanas de El Sistema de Electrófonos Londinense.

Esta cosa

El Sistema de Electrófonos era un servicio de Streaming que funcionaba a través de cableados telefónicos. Comprabas el receptor que te vendía la compañía y llamabas a una central telefónica donde amablemente te atendían y te ponían a escuchar cualquier soplapollez que quisieras escuchar en el momento. Siempre y cuando esta soplapollez formara parte del Sistema, porque si no había cables, dizque en la carnicería de Jack El Destripador en la esquina (no sé nada de 1800) no podías escuchar un carajo.

Este sistema funcionó desde 1895 hasta 1926. Y fue muy popular entre los yeyes de esa época. Su costo era de 5 libras al año. Equiparándolo al valor de la moneda de hoy en día es algo así como 570 dólares gringos. 47.50 al mes, estaba bien fucking cara esa shit. Tenía conexión a varias Iglesias (por si querías que te regañara el cura a distancia) y al Royal Opera de Londres (para escuchar las plenas del momento). Todo esto a través de micrófonos que estaban escondidos en estos lugares.

«Oh yeaaa! Drop the bass Mozart, Drop da Madafoquin Beisssss!»

Y allí lo ven, siempre que se sientan genios porque crearon algo y se pongan a darse golpes de pecho y a sentirse que son los que más mean, tengan en cuenta que probablemente en algún punto de la historia alguien creó algo similar a ustedes. Igual y no se me achicopalen y hagan su vaina, sáquenla y no miren hacia atrás.

Saludos y pronto vengo con más de estos artículos.